Bueno, pues ya está construido el relato de Salamina. Jujuju que diría Hippie; construir relatos se lleva mucho últimamente.
Recuerdos de Salamina
Y al paso que vamos, igual nos recorremos los escenarios de todas las guerras médicas. El Meltemi está peleón y recalcitrante este año; dejaremos que se calme, si quiere.
gracias soldada de salamina,cuidaos del meltemi,el cambio climatico no hay quien lo pare,al final vendreis todos para galicia que será el caribe,ya se la conoce como galifornia,abrazos
pues no me deja entrar al enlace ,me cajo en toooooo
Es curioso la multitud de pequeñas islas de Grecia a las que la gente no les presta atención, a los sumo los barcos que se refugian, se bañan y se van, otro sitio bonito para la colección. Curioso y una fortuna para ellas porque en cuanto llaman la atención ya están en peligro, como sus hermanas mayores. Voy a darle voz a un pequeño archipiélago, un universo excluido y especial que también tiene su historia que contar.
El archipiélago Petáli y el cazador
Cuidado que después de esta igual sigo con las guerras Médicas, este año me están dando mucho juego, una forma como otra de ir esquivando el Meltemi.
Navegar en el Egeo con Meltemi tiene su estrategia, como las regatas o las grandes travesías. Yo siempre lo imagino como una escalera. Aprovechas las calmas y días de vientos medios para subir escalones y luego te mueves en el mismo peldaño con las ventadas. Siempre que te dejes caer será difícil volver a subir; mas que difícil, habrá que tener paciencia y esperar. Esperando tampoco se está mal, yo creo que la contemplación del mar un día tras otro es un buen ejercicio de espíritu. El problema, como siempre es el dichoso tiempo, que corre como el viento, en contra. La verdad es que lo mejor en el Egeo, cuando el Meltemi se enrabieta y empecina, es no hacer muchos planes. Eso también está bien, nos pone en nuestro sitio.
Haciendo garabatos en Kithnos
Buen ventarrón se nos avecina. para el fin de semana.
Ceñir puede llegar a ser pesado, pero ver como el barco avanza hacia su destino es un motivo de superación. Cuando llegas y hay un buen abrigo, la satisfacción es enorme. Y si además tiene una historia que contarte ¡Ay amigo! entonces estamos hablando de Grecia
Buen domingo y buen Otoño a todos
La ensenada de Maratón y un perro persa
Supongo que hay que amoldarse a los tiempos, pero seguro que muchos de vosotros, los que lleváis algún tiempo navegando, habéis constatado un hecho desagradable; ya se echa en falta el compañerismo entre navegantes, la solidaridad, aquello que los ingleses calificaban como un correcto yatch man/lady; siempre con su sentido aristocrático de la existencia: rivales en la mar, hermanos al llegar a tierra. La masificación, el chárter y la llegada de navegantes que les da igual un barco que una caravana, hace que a veces te quedes atónito de como se comporta la gente y desees ir a sitios donde no veas más que pájaros y cabras.
Independientemente de eso, hoy quiero contaros la historia de dos puertos en la época clásica y como son en la actualidad. El paso del tiempo borra algunas huellas y descubre otras.
Feliz fin de semana y buenas navegaciones tengan todos. El verano griego se resiste a acabar y hay que estirarlo todo lo que se pueda.
Eretria, Halkida y el paso del tiempo
Cuando se tiene una misión en el viaje hay que cumplirla. Así que , cómo no, había que completar el periplo con el paso por las Termópilas para ver si nos encontrábamos con Leónidas y sus 300 espartanos.
Bueno, hoy, el paso de las Termopilas ha quedado engullido y asimilado a tierra, pero ¡Qué narices! uno se lo imagina igual. Además, lo bueno de un viaje son las cosas que no esperas.
Buen octubre para todo el mundo, es un mes precioso para navegar.
Termópilas, Artemision y unas barcas rojas
Bueno, para que no me digáis que solo suelto rollos históricos, aquí os dejo otra entrada en la que si me ha gustado contar una maniobra. El buen gusto por hacer elegantes maniobras creo que es el mejor atributo de un marino. No hace falta navegar por los 40 rugientes o los 50 bramadores, el armador que conoce los defectos y virtudes de su barco y los utiliza, se siente satisfecho, aunque no le vea nadie, da igual que el barco sea una pequeña dorna o una gran goleta. La total comunión entre barco y capitán es la mejor recompensa. Muchas veces sale mal, pero otras...un subidón de adrenalina. Creo que las buenas maniobras llevan a los barcos a los puertos más bellos.
Las buenas maniobras llevan a buenos puertos
(05-10-2019, 07:57 PM)La Maga escribió: [ -> ]Bueno, para que no me digáis que solo suelto rollos históricos, aquí os dejo otra entrada en la que si me ha gustado contar una maniobra. El buen gusto por hacer elegantes maniobras creo que es el mejor atributo de un marino. No hace falta navegar por los 40 rugientes o los 50 bramadores, el armador que conoce los defectos y virtudes de su barco y los utiliza, se siente satisfecho, aunque no le vea nadie, da igual que el barco sea una pequeña dorna o una gran goleta. La total comunión entre barco y capitán es la mejor recompensa. Muchas veces sale mal, pero otras...un subidón de adrenalina. Creo que las buenas maniobras llevan a los barcos a los puertos más bellos.
Las buenas maniobras llevan a buenos puertos
Muy buena narración! La maniobra se lee romántica y el relato es entretenido pero la parte de la taberna es magnífica, me imagino los acentos, los aromas y los sabores, la vista no la imagino porque has puesto foto:
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Que sigan las buenas aventuras con finales felices
(05-10-2019, 07:57 PM)La Maga escribió: [ -> ]Las buenas maniobras llevan a buenos puertos
La Maga es un queche y llevábamos todo el trapo arriba; genova, mayor y mesana. El barco empezaba a ponerse duro al gobierno y era necesario quitar la mayor para finalizar la recalada viento en popa. En esas condiciones, intentar arriar la vela, aconchada fuertemente contra el mástil es casi imposible, algo parecido a parar un coche acelerado por la bajada de una larga pendiente sin disponer de frenos, la única solución es girar y colocarlo cuesta arriba.
Hola Ana, me ha encantado tu relato, pero me ha sorprendido mucho, que gente de mar tan experimentada como vosotros, navegando en popa o a un largo, tenga que aproar el barco en medio de una marejada para tomar rizos.
En la náutica creo que todo ya está inventado y experimentado, con lo que realizar esa maniobra elegantemente solo es es cuestión acondicionar el equipo para poder realizarla sin variar el rumbo.
Saludos
(06-10-2019, 08:01 AM)Kaia escribió: [ -> ]Hola Ana, me ha encantado tu relato, pero me ha sorprendido mucho, que gente de mar tan experimentada como vosotros, navegando en popa o a un largo, tenga que aproar el barco en medio de una marejada para tomar rizos.
En la náutica creo que todo ya está inventado y experimentado, con lo que realizar esa maniobra elegantemente solo es es cuestión acondicionar el equipo para poder realizarla sin variar el rumbo.
Saludos
Bueno, mi barco es ya un clásico. Eso significa dinero a espuertas. Cambiar el carril y los patines de mayor estaría en el enesimo lugar de los gastos pendientes del barco. Así que como es un ketche seguiremos dejándolo a la capa con genova y mesana cuando haya que arriarla, hasta que nos toque la loto
. No he dicho nada de ponerlo proa al viento, igual me has malinterpretado. Este tipo de maniobras me gustan, porque son las que se realizaban con los barcos antiguos; como decía Conrad, uno se podía embelesar mirándolos como quien mira el cuadro de las bailarinas de Degas También puedes imaginar que la maniobra no está reenviada a bañera; eso era de nenazas cuando se diseño el barco
kaia,no lo entiendo eso,si vas de popa con viento fuerte a la mayor le cuesta bajar,lo digo porque me paso una vez y no es facil bajarla,es mi experiencia,es por eso que saque el tema de las carrileras,no se si bajara mejor o no,pero es mucha fuerza de viento y no veo otra forma de bajarla que no sea aproandote,pero como soy novato esperare a tener más experiencia para saber como se hace.gracias a tod@s por enseñarme todo lo que sabeis,un abrazo
