Iperkeno era ese cofre, un cofre lleno de erudición, lleno de conocimiento y cerrado. No era casual su icono, nada en él era casual, y lo sabemos muy bien todos los que lo leíamos.
Tenía sus motivos para no poner fotos y no tener encuentros.
Tenemos en algún lugar, pero no a bordo, documentos que acreditan muchos de sus logros, los rescataremos y los compartiremos, él me lo pidió.
Como muestra, un botón, lamento la calidad, pero habrán imágenes mejores.
Aquí lo tenéis, con 17 años, analizando una de sus obras.
Estará cruzando en Sahara per enésima vez.
El capità no és el capità, el capità es la mar. (Jesús Lizano)