(07-10-2021, 12:05 PM)manjuari escribió: Que buenos tiempos, ahora la administración es quien se encarga de que te vaya mal y que te la tengas que estar arreglando constantemente para cumplir con todos sus desvaríos.
No entiendo como puedo sufrir nostalgia de unos tiempos que nunca pude vivir.
Claro, ahora es así. Te "cuidan" (léase sobre protegen y a la vez te vuelven loco con papeles) pero a cambio, tienes GPS, VHF, DSC, AIS (aunque sea receptor). Todo tiene su pro y su contra.
Aproximadamente en esos años tuve mi primer contacto con la mar, en una merlucera profesional, para pescar bonito del norte (Thunnus alalunga). A las 4 de la mañana, en la punta del rompeolas se consultó el "Windy": reunión de patrones. El de más edad dijo que se podía salir, pero que al loro después a la tarde. El resto no lo veía muy claro. Se votó y salió salir. Más o menos cuadró con lo que dijo el "windy": a la mañana hubo una mar casi sin ola y, una vez superado un mareo fenomenal, lo pasé muy bien, aunque se pescó muy poco.
En un momento pregunté al patrón dónde estábamos. Después de consultar el GPS (o sea, echarse la boina atrás y mirar hacia donde parecía que estaba la costa), dijo que "eso" era el monte nosequé y delante estaba Cabo Peñas.
A la tarde, cumplió y volvimos entre olas de 3-4 metros. El patrón, mientras el marinero estaba en proa "rezando", me empezó a enseñar a negociar olas, de aleta. Cada vez que fallaba una, el marinero me miraba con cara de asesinarme y juraba además de rezar. Volvimos a Bermeo. Sanos y salvos. No sé si tendría radio. Antena no tenía desde luego. tenía una cabinita justo con un compás. Tampoco tenía tanque de kks. Cuando el patrón se bajaba los pantalones y sacaba el culo por la borda, mirabas a otro lado, por pudor...
En 1990, compramos, con mis cuñados, la primera chipironera, de madera con un motor Beal de 1964. Fuimos a la Comandancia de Marina en Bermeo. "tenéis que poner luces" "no tiene electricidad, mi comandante" "Y ¿cómo lo vais a hacer si hay niebla o de noche?" "NO saldremos, mi comandante" "Ala, marchad, pero poner luces en cuanto podáis" (mientras ponía el sello y la firma en el rol y nos despachaba para poder ir a Lekeitio). Lo primero que me enseñaron: "cuando veas que un viejo empieza a recoger, por mucho que estés pescando, recoge y vuelve a puerto".
No me pongo nostálgico, ni son "mis tiempos" (porque mientras viva, mis tiempos son los de ahora). Pero los tiempos cambian, para bien o para mal. O para ambos. Y, en mi opinión, ahora es verdad que nos vuelven locos, pero en cuanto a seguridad... no hay color. Mejor ahora.
La aventura de este hombre o la de Julio Villar, hoy en día no sé si hubieran sido posibles... Para empezar, ni pensar en menos de un 40 pies, claro.