02-08-2019, 08:49 AM
02/08/2019
Estamos fondeados la Petite Marie y Regina solos en Anafi, una pequeña isla al Este de Santorini. Al día siguiente a nuestra llegada todavía no hemos pisado tierra, pero esa tarde Marie y Marcos botan su auxiliar y nos pasan a recoger, la nuestra todavía sigue en los pescantes. Ha llegado un barco verde de acero que larga el hierro entre ambos.
Nos encontramos un pueblo minúsculo al lado del puerto, a primera vista parece uno de esos lugares de los que ya quedan pocos, a los que llega muy poca gente. ¡Nos encanta!
El pueblo de la parte alta de la montaña es mas grande y ascendemos por un camino que nos lleva directos hacia él, tardamos unos 20 minutos en llegar, la vista del fondeo es realmemte espectacular. Pensamos que tal vez haya alguien mas arriba, pero nuestra sorpresa y desencanto son mayúsculos cuando nos encontramos sus calles plagadas de tabernas y turistas, aunque en este caso son sobre todo "modernos hippies", si se puede calificar así, mochileros, rastas, flores..., después pudimos ver que a la isla llegan varios ferrys enormes.
Recorremos sus calles y al atardecer estamos en lo mas alto, en la plaza. ¡Increíbles vistas de la vecina isla de Santorini!
Regresamos al barco ya de noche. Seguimos estando los tres barcos fondeados, pero me parece que el barco verde de nuestros vecinos ha garreado un poco y está algo mas atrás, no tiene puesta la luz de fondeo. Nos preparamos la cena y vemos la tele un rato, como en una hora y media nos metemos en la cama.
Al cabo de un rato Mónica me despierta y me dice que hay alguien llamando, me levanto y salgo a la bañera, son dos chicos con un niño pequeño en un kayak, me dicen que su barco no está y que si lo hemos visto. Comenzamos a hablar con ellos en inglés y les explicamos que parecía que había garreado un poco cuando llegamos nosotros, Carlos, el chico de la canoa nos pregunta si somos españoles, ¡vaya!, ¿sois españoles?, solo yo, me contesta Carlos. Seguimos mirando para ver si conseguimos ver donde puede estar el barco, la noche sin luna, como "boca de lobo". Le digo que suban a bordo, que vamos a buscarlo.
Hay mas de 20 nudos y una buena ola, recogemos el fondeo y salimos rumbo sur, ponemos el foco grande de búsqueda en la bañera y llamamos a los chicos de la Petite Marie para alertarles sobre nuestras intenciones. Al cabo de poco tiempo recibimos la llamada de Marcos por VHF diciéndonos que tiene al resto de la tripulación del barco perdido a bordo y que se une también a la operación de búsqueda.
Llevamos ya un rato pero no damos con el velero, es difícil, no se ve nada, Carlos me sugiere que vayamos algo mas hacia el Este, ya que ahora está soplando fuerte con componente Oeste. Cambiamos rumbo. Mientras tanto Julia esta en la proa y Mónica en una banda, agudizando la vista...., el chaval se mete en la cabina y se queda dormido.
Hay un pequeño islote justo hacia nuestro nuevo rumbo, como el barco haya ido en esa dirección "estamos apañaos", tal vez esté varado en el islote.
Recibo una llamada de Marcos y me dice que conecte el radar, que tal vez de ese modo podamos dar con él, ¡mierda, como no se me ha ocurrido antes!, ¡además el barco es de acero!, debería darnos un eco potente si no está demasiado lejos. No veo nada claro en el radar, hay mucho mar. Marcos me localiza en el AIS y conecta también su radar aunque de momento no tenemos un objetivo claro.
Sigue pasando el tiempo..., y seguimos sin objetivo, yo estoy a la rueda, las chicas en cubierta poniéndose perdidas con los rociones, Carlos en la cabina muy atento al radar por si surgiera algún objetivo..., sigue pasando el tiempo...
Mi idea es rodear el islote dejándolo por estribor, espero que tengamos suerte...
De repente Marcos me llama y me dice que tiene un posible objetivo en nuestra proa, casi simultáneamente me llama Carlos y me insta a comprobar un posible objetivo en el radar. ¡Joder, sí, allí está, es un eco bastante claro a 2 millas de nuestra posición. Ahora nosotros llevamos rumbo Este y nos encontramos entre la isla de Anafi y el pequeño islote. Ponemos rumbo directo al objetivo..., Marcos me guía desde su barco contrastando nuestra posición en el AIS y su radar y Carlos desde la cabina con nuestro radar.
Seguimos hacia el objetivo, de vez en cuando conectamos el foco, la distancia se va acortando, 1 milla.
Al cabo de un rato Marcos nos dice que debemos estar a media milla..., seguimos sin ver nada..., mientras tanto llevo un rato pensando en como rescatar el barco si damos con él, hay mucho mar y viento, se me ocurre atar un cabo lo suficientemente largo a la canoa y ponerme a barlovento del barco a la deriva, entonces, cuando esten los chicos en la canoa ir filando cabo hasta que lleguen al barco, ¡joder, espero que todo salga bien!, lo último que necesitamos ahora es un MOB!
Estamos como a 200 metros del objetivo, ¡debería estar ya a la vista!, Marcos me dice que tendríamos que verlo ya, ¡joder tío, te lo vas a comer!...seguimos dando pasadas con el foco...
¡Allí está!, ¡joder, ya lo tenemos!, ¡no lo perdáis de vista!, ¡saltamos todos de alegría!. Llamo a Marcos, ¡objetivo a la vista chaval!, ¡ya lo tenemos!, oímos los gritos de alegría por la vhf...
El barco había recorrido mas de 3 millas a la deriva...
Tal como he planeado empezamos con la operación abordaje..., Carlos sube el primero al kayak, con mucha dificultad, hay mucha ola, Julia le pasa los remos e intenta subir también, pero el bamboleo es muy importante, temo que pueda irse al agua..., finalmente están los dos a bordo de la pequeña canoa y vamos filando cabo, los barcos se alejan demasiado, y tengo miedo de atrapar el cabo con la hélice si engrano marcha. Ya no nos queda casi margen, no hay mas cabo...Por fin están al lado de su barco, Mónica no les pierde de vista con el foco. Vemos como Julia, después de varios intentos consigue subir a bordo por la banda, después asciende Carlos. ¡Uf, ya está, lo hemos conseguido, volvemos a la bahía!
Seguimos a Marcos, vemos su luz de popa, y vemos también las luces de proa del barco de Julia y Carlos.
En un rato estamos fondeados de nuevo y Julia y Carlos llegan también para largar el hierro entre la Petite Marie y Regina. Pasarán en un momento para recoger al peque, quedamos en que nos tomaremos una copita de vino mañana...Son las 4 de la mañana.
El track de la operación rescate
El fondeo
Hace un momento, la Petite Marie y nuestros vecinos del "barco perdido"
Estamos fondeados la Petite Marie y Regina solos en Anafi, una pequeña isla al Este de Santorini. Al día siguiente a nuestra llegada todavía no hemos pisado tierra, pero esa tarde Marie y Marcos botan su auxiliar y nos pasan a recoger, la nuestra todavía sigue en los pescantes. Ha llegado un barco verde de acero que larga el hierro entre ambos.
Nos encontramos un pueblo minúsculo al lado del puerto, a primera vista parece uno de esos lugares de los que ya quedan pocos, a los que llega muy poca gente. ¡Nos encanta!
El pueblo de la parte alta de la montaña es mas grande y ascendemos por un camino que nos lleva directos hacia él, tardamos unos 20 minutos en llegar, la vista del fondeo es realmemte espectacular. Pensamos que tal vez haya alguien mas arriba, pero nuestra sorpresa y desencanto son mayúsculos cuando nos encontramos sus calles plagadas de tabernas y turistas, aunque en este caso son sobre todo "modernos hippies", si se puede calificar así, mochileros, rastas, flores..., después pudimos ver que a la isla llegan varios ferrys enormes.
Recorremos sus calles y al atardecer estamos en lo mas alto, en la plaza. ¡Increíbles vistas de la vecina isla de Santorini!
Regresamos al barco ya de noche. Seguimos estando los tres barcos fondeados, pero me parece que el barco verde de nuestros vecinos ha garreado un poco y está algo mas atrás, no tiene puesta la luz de fondeo. Nos preparamos la cena y vemos la tele un rato, como en una hora y media nos metemos en la cama.
Al cabo de un rato Mónica me despierta y me dice que hay alguien llamando, me levanto y salgo a la bañera, son dos chicos con un niño pequeño en un kayak, me dicen que su barco no está y que si lo hemos visto. Comenzamos a hablar con ellos en inglés y les explicamos que parecía que había garreado un poco cuando llegamos nosotros, Carlos, el chico de la canoa nos pregunta si somos españoles, ¡vaya!, ¿sois españoles?, solo yo, me contesta Carlos. Seguimos mirando para ver si conseguimos ver donde puede estar el barco, la noche sin luna, como "boca de lobo". Le digo que suban a bordo, que vamos a buscarlo.
Hay mas de 20 nudos y una buena ola, recogemos el fondeo y salimos rumbo sur, ponemos el foco grande de búsqueda en la bañera y llamamos a los chicos de la Petite Marie para alertarles sobre nuestras intenciones. Al cabo de poco tiempo recibimos la llamada de Marcos por VHF diciéndonos que tiene al resto de la tripulación del barco perdido a bordo y que se une también a la operación de búsqueda.
Llevamos ya un rato pero no damos con el velero, es difícil, no se ve nada, Carlos me sugiere que vayamos algo mas hacia el Este, ya que ahora está soplando fuerte con componente Oeste. Cambiamos rumbo. Mientras tanto Julia esta en la proa y Mónica en una banda, agudizando la vista...., el chaval se mete en la cabina y se queda dormido.
Hay un pequeño islote justo hacia nuestro nuevo rumbo, como el barco haya ido en esa dirección "estamos apañaos", tal vez esté varado en el islote.
Recibo una llamada de Marcos y me dice que conecte el radar, que tal vez de ese modo podamos dar con él, ¡mierda, como no se me ha ocurrido antes!, ¡además el barco es de acero!, debería darnos un eco potente si no está demasiado lejos. No veo nada claro en el radar, hay mucho mar. Marcos me localiza en el AIS y conecta también su radar aunque de momento no tenemos un objetivo claro.
Sigue pasando el tiempo..., y seguimos sin objetivo, yo estoy a la rueda, las chicas en cubierta poniéndose perdidas con los rociones, Carlos en la cabina muy atento al radar por si surgiera algún objetivo..., sigue pasando el tiempo...
Mi idea es rodear el islote dejándolo por estribor, espero que tengamos suerte...
De repente Marcos me llama y me dice que tiene un posible objetivo en nuestra proa, casi simultáneamente me llama Carlos y me insta a comprobar un posible objetivo en el radar. ¡Joder, sí, allí está, es un eco bastante claro a 2 millas de nuestra posición. Ahora nosotros llevamos rumbo Este y nos encontramos entre la isla de Anafi y el pequeño islote. Ponemos rumbo directo al objetivo..., Marcos me guía desde su barco contrastando nuestra posición en el AIS y su radar y Carlos desde la cabina con nuestro radar.
Seguimos hacia el objetivo, de vez en cuando conectamos el foco, la distancia se va acortando, 1 milla.
Al cabo de un rato Marcos nos dice que debemos estar a media milla..., seguimos sin ver nada..., mientras tanto llevo un rato pensando en como rescatar el barco si damos con él, hay mucho mar y viento, se me ocurre atar un cabo lo suficientemente largo a la canoa y ponerme a barlovento del barco a la deriva, entonces, cuando esten los chicos en la canoa ir filando cabo hasta que lleguen al barco, ¡joder, espero que todo salga bien!, lo último que necesitamos ahora es un MOB!
Estamos como a 200 metros del objetivo, ¡debería estar ya a la vista!, Marcos me dice que tendríamos que verlo ya, ¡joder tío, te lo vas a comer!...seguimos dando pasadas con el foco...
¡Allí está!, ¡joder, ya lo tenemos!, ¡no lo perdáis de vista!, ¡saltamos todos de alegría!. Llamo a Marcos, ¡objetivo a la vista chaval!, ¡ya lo tenemos!, oímos los gritos de alegría por la vhf...
El barco había recorrido mas de 3 millas a la deriva...
Tal como he planeado empezamos con la operación abordaje..., Carlos sube el primero al kayak, con mucha dificultad, hay mucha ola, Julia le pasa los remos e intenta subir también, pero el bamboleo es muy importante, temo que pueda irse al agua..., finalmente están los dos a bordo de la pequeña canoa y vamos filando cabo, los barcos se alejan demasiado, y tengo miedo de atrapar el cabo con la hélice si engrano marcha. Ya no nos queda casi margen, no hay mas cabo...Por fin están al lado de su barco, Mónica no les pierde de vista con el foco. Vemos como Julia, después de varios intentos consigue subir a bordo por la banda, después asciende Carlos. ¡Uf, ya está, lo hemos conseguido, volvemos a la bahía!
Seguimos a Marcos, vemos su luz de popa, y vemos también las luces de proa del barco de Julia y Carlos.
En un rato estamos fondeados de nuevo y Julia y Carlos llegan también para largar el hierro entre la Petite Marie y Regina. Pasarán en un momento para recoger al peque, quedamos en que nos tomaremos una copita de vino mañana...Son las 4 de la mañana.
El track de la operación rescate
El fondeo
Hace un momento, la Petite Marie y nuestros vecinos del "barco perdido"