Gogoetak, ( recuerdos) Pesca de Besugos nevando, 10/02/83, III parte.
La nieve caía sin viento, pique pique, había mucha humedad después del café cada uno fue a su puesto, nosotros no cortábamos la carnada en la ruta, sino en la Kala, para mi era lo peor, el relanzón solía estar todavía duro de la congelación y se te agarrotaban los dedos enseguida,nosotros trabajábamos con 10 cañas, estábamos en Garro y no había mucho fundamento de cuando en cuando subian unos besugos , yo recuerdo bien que lo que pedía aquel día es que no hubiera muchos “nastes”, ( liadas de aparejos) hay que reconocer que en un barco de 25 m de eslora por 6 de manga si trabajas con 10 aparejos a una gran profundidad se liaban entre ellos y lo que era peor liabas tus aparejos con los de otros barcos de alrededor, muchas veces las broncas eran continuas, que otro barco ha metido tres aparejos de tu banda porque han virado mas rápido, en ese momento sacaban los cuchillos y pica ( corta) y pica aparejos, punteras besugos la de dios jajaja, la ley decía que el que metía el lio de aparejos tenia que dar al otro barco la mitad del pescado total ( según cuantos aparejos de cada barco estuvieran implicados) y también muy importante, los plomos lo que generaba mas de una tirantez entre los barcos...
La cosa es que aquel día arriba estaba un infierno pero abajo no había mucha corriente, ni viento ni deriva y no hicimos la verdad muchos nastes, que implicaran un trabajo manual extremo, la cuestión es que no se podía trabajar con guantes, pues a esa pesca había que estar continuamente corta pita, anuda la línea, pon carnada, era un oficio muy muy exigente para pescadores finos, esto no era meter 20 toneladas de verdel con solo apilar la red que te venia en banda del halador.. y claro con el frio las manos también perdían toda sensibilidad.
A media mañana solíamos desayunar unas perlitas fritas recién pescadas, que solía preparar Rufino, el cocinero improvisado para esa costera, se comía todo en cubierta al lado de los aparejos.
La cosa es que quizás por que hacia muy malo o no se quien era el que decidía eso, los barcos ( estábamos unos 50/60) arrancamos para la cala Ixkote que estaba 4 al millas al norte dentro de la famosa bisectriz de la zona VIII y por lo tanto en aguas francesas, por aquel entonces la guerra nos la tenían mas que declarada, la patrullera de Affaires marítimas Ancelle (PM25) todos los años apresaba a unos cuantos, era lo de siempre, nosotros reclamábamos unos derechos de pesca históricos mientras ellos trazaron su línea divisoria física y a todo el que se pasara para el este lo apresaban pues Francia por aquel entonces no nos daba licencias para aquella pesca en aquellas aguas, lo que solíamos hacer era entrar, hacer las caladas que nos dejaran antes de que alguno nos avisara de que salía el “guarda” de san juan de luz ( yo creo que teníamos servicio de espionaje en tierra), o si venia de fuera alguno con un radar en condiciones ya avisaría de un objeto que se acercara al triple de velocidad que un pesquero, y de aquella solo quedaba meter los aparejos todo lo rápido que se pudiera y avante toda rumbo aguas españolas en menos de media hora asunto zanjado , yo recuerdo al patrón gritándole al maquinista baja a la maquina rápido y dale al motor todas las vueltas que tiene que de aquí arriba no me da!! ( teniamos trasmision por barra en vez de tener por cable y se perdia mucho) yo entre mi solía pensar, para rato bajo yo a apretar manualmente la palanca de acelerador del motor, salido de vueltas como esta para que me salga un pistón por el bloque, miedo daba estar en cubierta, como para bajar al agujero!, la verdad es que nosotros no teniemos mucho para perder pues a la carrera corriamos mas qe el 80% de los barcos que escapabamos de la zona, pero el otro al correr el doble pues podia seleccionar a este si o al otro no....
La cosa es que aquel día se pensó que el guarda no saldría y para las 11 de la mañana allí que cruzamos al otro lado de las líneas, ixkote la cala por excelencia de los pescadores del este de la costa vasca ahora en territorio Francés, y un comandante de patrullera que decían que era de descendencia Argelina ( lo tengo para confirmar) que tenia un odio desproporcionado que rallaba lo personal con la flota española, años antes se vieron en la mar ráfagas de ametralladora para parar a los barcos.
Y allí fuimos, cuando vimos el rumbo enseguida empezamos cambiar los aparejos, el besugo como vive pegado al fondo se pescaba con líneas de 15/18 anzuelos separados una braza uno de otro y creo que anzuelo n2, mientras la merluza un pez mas pelágico subía mas del fondo y por lo tanto la separación entre anzuelos era del doble y el anzuelomas grande, la carnada para besugo se andaba relanzón cortado en trozos mientras la merluza se pescaba con sardina...
La cala al estar dentro de la línea era un criadero de peces, diríamos que había una “veda militar” jeje, nosotros calabamos en popa, solíamos tener también una guerra interna con los de proa, mientras nosotros nos quejábamos que estando debajo de la vela de mesana andábamos siempre entre corriente y que teníamos el peligro añadido de le elice, los de proa decían que menuda tenemos nosotros que todo lo tenemos que hacer a la vista del patrón jajaja, la kala era muy rica y nada mas calar ya mandaba virar el patrón y a medio agua subían las merluzas tripa arriba por la descompresión, dos merluzas hacían flotar un plomo de kilo, lo malo era que no dejaba de nevar, y lo peor de la nieve es que dejaba las pantallas de aquellos viejos radares llenos de parásitos, justo se veía los barcos mas cercanos, vista no había mucha y de repente allí apareció mas cerca que lejos sin que nadie lo esperara, la silueta de un barco gris!! ..............
Continuara.....
Nota, entre que hay que explicar esto y lo otro, se me esta haciendo un dia de largo!!
Dibujos y fotos ( menos la de la patrullera) de la enciclopedia Itsasoa, tomo 2 pesca de litoral..