2.5 TUBÉRCULOS Y VERDURAS
También estos alimentos pueden conservarse por un tiempo razonable si se tienen en cuenta algunas consideraciones:
Los repollos y lombardas deben ir consumiéndose quitando las hojas externas de todas la piezas que haya a bordo y así, todas a la vez, evitaremos que se deteriore ninguna. Las zanahorias , puerros y resto de productos similares, con raíces deben estibarse verticales, duran más tiempo frescos, y no digamos ya si las llevamos introducidas en alguna caja que contenga arena húmeda... lo ideal para que duren más. El problema es el peso, claro. Los pimientos, tomates, calabacines, berenjenas y demás, deben estibarse también con poca luz si es posible, y sin que se golpeen. La humedad del ambiente ayudará mucho a su conservación.
Las patatas, como ya se dijo, guardadas aparte con las manzanas, cuanta menos luz, mejor.
Es muy aconsejable que tanto frutas como verduras y tubérculos no se laven hasta el momento en que vayan a ser consumidos. Y recordad también que en las pieles se encuentran sustancias muy beneficiosas desde el punto de vista de la alimentación y la salud. Siempre que sea posible deberían conservarse. y un consejo más
TODA LA FRUTA, SALVO LAS MANZANAS, DEBERÍA IR ESTIBADA
POR ENCIMA DE LAS VERDURAS Y TUBÉRCULOS, PORQUE DE ESTE MODO LA MADURACIÓN DE LAS VERDURAS SE RETRASA. Y ES MUY IMPORTANTE QUE TENGAN VENTILACIÓN Y QUE NO RECIBAN LUZ SOLAR, LA MENOS POSIBLE.
Hay ciertas verduras que se estropean enseguida, por ejemplo la lechugas, pero si adquirimos las llamadas " hoja de roble" con raíz y las conservamos junto a los puerros, semienterradas en arena húmeda y vamos gastando las capas externas de todas ellas, lograremos que se conserven bien bastante tiempo.
En realidad, todas las verduras que conserven su raíz en arena húmeda están vivas y en unas condiciones parecidas a las de crecimiento, pero con un sustrato, la arena, que no les aporta mas que humedad.
Pero también con el repollo podemos hacer ensalada, como se verá más adelante, cuando entremos en las recetas.