Como siempre, me gustaría escribir más de lo que puedo. Pero la vida va como va...
Hace una semana, en la infinita puesta a punto del Gran Azul, estaba haciendo unos cambios de tuberías y codos del lavabo de proa...
Aunque lo había escuchado cientos de veces, no me había pasado a mí personalmente.
Era de las muchas cosas que tiene el GA que me tenian con la mosca detrás de la oreja...
Los pasacascos en vez de estar soldados, son los clasicosdemierda de latón.
Pues ajustando un codo al grifo... Paff... Cortado por la base!
Estaba solo. Por lo que me quite la camiseta, tapone y fui a buscar los espiches...
Era por la mañana, y a la tarde me iba a las motos, por lo que aseguré bien el espiches y me fui!
No entraba ni una gota.
Así se quedó dos semanas, hasta este finde pasado que le metí mano.
Por supuesto, sin tiempo, no barajaba vararlo para reparar.
Así que corté el espiches a ras, y empecé a soldar poco a poco...
En un momento, casi a punto de tener todo el cordón hecho, el espiches se sale!
Puse la válvula que iría después, y me puse a darle a la cabeza, pues entraba agua por las soldaduras sin terminar...
Lo más fácil, era suspenderlo 10min y soldarlo. Pero era sábado y no quería gastar pasta ni tiempo...
Por lo que os cuento lo que se me ha ocurrido (y ha funcionado) que me sigo sintiendo orgulloso del apaño...
Caja de plástico del Ikea, masilla de butilio en todo su perímetro, entronque de manguera con más masilla, manguera, bomba de agua (de recambio) cabo a través del barco, crica y a vaciar el agua!
Unas imágenes...
Otra ventaja de la facilidad de reparación del acero.
Por supuesto por fuera quedó sin pintar, pero bajo el agua la falta de oxígeno hace que pueda estar años sin apenas corrosión.
Ya había cambiado 2 pasacascos, pero viendo lo visto, el año que viene con la varada anual pondré todos soldados!
Salud!